El corregimiento de La Parada, primer poblado de la república de Colombia que consiguen los venezolanos que cruzan el puente internacional Simón Bolívar, sigue siendo un monumento al crimen, al terror y a la anarquía, donde cualquier cosa puede ocurrir. A diario circulan denuncias, relatos e innumerables fotos y vídeos sobre el accionar de numerosos grupos de delincuentes en este sector del municipio Villa del Rosario (norte de Santander). No se trata solamente del llamado “tren de Aragua”, organización criminal trasnacional integrada en su mayoría por venezolanos. En La Parada hay guerrilla, paramilitares, bandas criminales, narcotraficantes, secuestradores, grupos armados residuales, extorsionadores y, en fin, todo tipo de expresión criminal, según los códigos y denominaciones de los organismos de seguridad, quienes por cierto, se resisten a emprender acciones contundentes contra estos peligrosos hampones que azotan a comerciantes y visitantes por igual. También hay una disputa a mue...