Conexión Cárdenas (21-11-2022): Asesino con inmunidad



El doble rasero de EE.UU. en su supuesta cruzada mundial por la defensa de los DDHH y las libertades ciudadanas, ya no sorprende a nadie y más cuando se trata de proteger y lavar la imagen de gobiernos criminales con los que comparte intereses comunes que, desde la óptica de la diplomacia norteamericana, tienen carácter estratégico. La semana que finalizó, el gobierno de Joe Biden blindó con inmunidad al príncipe heredero de Arabia Saudí, Mohamed bin Salmán, quien es acusado de haber ordenado el asesinato, descuartizamiento y desaparición del periodista árabe Jamal Khashoggi, columnista y colaborador de The Washington Post, quien era crítico del régimen saudí.

El horroroso asesinato ocurrió en el consulado Saudí en Estambul, donde el periodista tenía programada una cita para tramitar algunos documentos personales, ya que se casaría en los días siguientes. La ocasión fue aprovechada por el régimen árabe para planificar la muerte de Kashoggi. 15 asesinos, posteriormente identificados como funcionarios de la inteligencia árabe, llegaron a Turquía en un avión oficial para cometer el crimen dentro del Consulado, con la complicidad del personal diplomático saudí. Una vez que el periodista ingresó, fue sometido, torturado y descuartizado. Posteriormente sus restos fueron disueltos en ácido y arrojados por los desagües de la sede consular.

Lo que nunca imaginaron los asesinos era que la víctima había acudido a la cita acompañada por su prometida, quien lo esperaba en las afueras de la instalación y dio la alarma al ver que Kashoggi nunca salió del lugar. Mucho menos sospechaba la banda de sicarios y descuartizadores, así como sus cómplices diplomáticos, que el consulado estaba bajo vigilancia electrónica por parte de la inteligencia turca, que había plantado cámaras y micrófonos en varias secciones de la edificación, entre ellas la oficina del cónsul, donde fue asesinado el periodista. Todo quedó grabado, los desgarradores gritos de la víctima y de sus verdugos fueron registrados por los micrófonos turcos y posteriormente consignados como evidencia en el proceso de investigación conducido por el gobierno de Turquía y en el que además participaron la CIA y el FBI.


Los asesinos huyeron en el mismo avión en el que llegaron y, ante la presión de la opinión pública, fueron arrestados en Arabia Saudí, supuestamente para procesarlos por el asesinato. Todo quedó así. Del desarrollo de las investigaciones se llegó a la conclusión de que el autor intelectual del monstruoso crimen fue el mismísimo príncipe heredero, Mohamed bin Salmán. Olvidado el escándalo, el caso fue engavetado hasta la semana que recién terminó, cuando Joe Biden ordenó blindar al asesino otorgándole inmunidad ante la justicia norteamericana. Es decir, ninguna autoridad de EE.UU. puede investigar y mucho menos arrestar al criminal. Cosas de la democracia más perfecta del mundo, la que evalúa y sanciona a los violadores de DDHH del resto del planeta.


El Comando Sur en Colombia


Desde la llegada de Gustado Petro al poder, Colombia ha intensificado la cooperación militar y en otras áreas con Estados Unidos y sus Fuerzas Militares. El pasado 11 de noviembre arribó una vez más a Cartagena el barco hospital US Confort. Y un poquito más atrás, en otra nave, venía la jefa del Comando Sur, general Laura Richardson. Proseguían así la cooperación y las actividades conjuntas, que van desde atención humanitaria y jornadas de formación en la prevención y control de desastres, hasta maniobras de entrenamiento militar con tropas de la Guardia Nacional llegadas desde EE.UU.


Tras el arribo del US Comfort, el Ministerio de la Defensa de Colombia dijo en una declaración pública que era “una muestra más de la permanente cooperación bilateral entre ambos países por la defensa de la vida”. Uno de los puntos clave de la agenda de la general Richardson en tierras colombianas era reunirse con los líderes gubernamentales y militares para discutir la cooperación continua en materia de seguridad. De otro lado, según anuncios oficiales, en el Comfort se realizaron actividades médicas como consultas, exámenes y cirugías, para brindar asistencia humanitaria a migrantes venezolanos y residentes colombianos de escasos recursos. A bordo del barco llegó la banda militar de la US Fleet Forces Band, que fue desplegada en los últimos días por varios puntos de Cartagena para ofrecer shows musicales públicos.


Otra actividad de la cooperación Colombia-EE.UU. es el desarrollo con carácter prioritario del programa Woman Peace and Security (WPS), encuadrado dentro de la misión humanitaria del barco hospital US Confort en Colombia. La jefa del Comando Sur instaló el evento y fue una de las ponentes. La iniciativa -explicaron- está dirigida al público femenino y, según la oficial norteamericana, “destaca la importancia de las mujeres y reconoce que son actores críticos en todos los esfuerzos para lograr una paz y seguridad internacional sostenibles”


Estos últimos días también se han realizado jornadas de capacitación en asistencia humanitaria y socorro en casos de desastres, en las que los instructores norteamericanos transmitieron sus conocimientos a efectivos de las FF.MM. y organismos de socorro colombianos. El ejercicio de rescate marítimo en Cartagena, conjuntamente con la Armada de Colombia, sirvió para demostrar capacidad de respuesta a emergencias mediante técnicas de buceo y salvamento, aviación naval, guardacostas y hospital naval. Asistieron inspectores del Western Hemisphere Institute Security Cooperación (WHINSEC); US Naval Forces Southern Command and US 4th Fleet; Embajada de EE.UU. en Bogotá y Ministerio del Interior de Colombia.


Hubo también un Seminario de Planeamiento Interagencial Acción y Crisis, para los ejercicios de prevención de desastres, con el WHINSEC, Ejército de Colombia, Policía de Colombia, Defensa Civil Colombia, Cruz Roja Colombia y la Unidad Nacional de Gestión de Riesgo de Colombia (UNGRD) y un encuentro de la general Richardson con el Comandante General de las Fuerzas Militares de Colombia, general Helder Giraldo y personal de las FFMM de Colombia, para discutir la implementación de la iniciativa Women Peace and Security (WPS), “para mejorar la seguridad en el Hemisferio Occidental”.


Previo a la llegada del buque-hospital a Cartagena, soldados del Ejército de Colombia ya habían iniciado ejercicios de entrenamiento denominados Southern Vanguard, con tropas de la Guardia Nacional de EE.UU. procedentes de Illinois y Georgia, así como del Comando Sur. Los ejercicios conjuntos entre los uniformados norteamericanos y sus “socios” colombianos se realizaron en el Fuerte Militar de Tolemaida (municipio de El Nilo, Cundinamarca) e incluyeron maniobras de búsqueda y salvamento en helicópteros Black Hawk.


Definitivamente, Gustavo Petro está “entrampado” en el dilema de ser o no ser. Del lado norteamericano se aprecia un esfuerzo mayor por hacer del conocimiento público todas las actividades y ejercicios conjuntos, y temas de cooperación que en tiempos anteriores se realizaban sin mucho ruido y con bajo perfil. Sigue siendo un acertijo el tipo de relación que el gobierno de Petro mantiene (y mantendrá) con Estados Unidos.

Pan andino con “estrellas Michelin”

Al mejor estilo de los estándares de calidad existentes en otras latitudes del mundo, el tradicional pan andino, ampliamente reconocido en todo el país y más allá de nuestras fronteras, será un producto certificado, como parte de un proyecto que tiene como propósito reivindicar la calidad y la tradición de consumo del pan dulce. El Consejo de Panaderos del estado Táchira trabaja en el proyecto, que debe aplicar para las distintas variedades del emblemático producto. La iniciativa, de vieja data pero que por fin saldrá del papel, no busca crear competencia, categorías o referentes que incidan en los precios, sino en la calidad del pan que es comercializado, que, gracias a este plan, pasará a tener su sello de garantía o certificación de calidad y origen.


El proyecto será anunciado oficialmente en el Festival del Pan Tachirense, que se realizará entre el 9 y el 11 de diciembre próximos en el Círculo Militar de San Cristóbal, bajo la organización del Consejo de Panaderos del Táchira, Asopan, Gobernación del Táchira, Fedecámaras Táchira, Cenexpo y una larga lista de gremios, asociaciones y empresas patrocinantes y vinculadas al sector. Enhorabuena por los artesanos y los empresarios dedicados a la elaboración de pan azucarado, de leche, de mantequilla, de avena, de maíz, acema de queso con bocadillo y otras delicias tachirenses que podrían verse beneficiadas con esta propuesta de los gremios que los agrupan. ¡Que así sea!

Toiquito sin gas


Lo que les viene sucediendo a los habitantes de la comunidad de Toiquito, ubicada en el municipio Guásimos, se cuenta y no se cree. Pagaron el gas hace dos meses a un representante de la alcaldía, en cuyo frente se encuentra el Dr. Evaristo Zambrano y aún no han recibido el preciado servicio que le permite a la gente cocinar y alimentarse. Pero lo más insólito es que, pese a esta irregularidad -no es normal que, habiendo pagado por adelantado, haya transcurrido tanto tiempo y no les dan el gas- ahora les están exigiendo que paguen un nuevo despacho que, según les dijeron, les debe llegar en enero de 2023. Sí, ¡el próximo año!

Otra cosa totalmente irregular es que la propia alcaldía de Guásimos, que sirve de intermediario para el abastecimiento del gas, no acepte Bolívares, justo cuando la república hace un esfuerzo enorme por salir del atolladero económico e incentiva el uso de Bolívares Digitales y de canales electrónicos para los pagos. Pues resulta que a los habitantes de Toiquito y de todo el municipio Guásimos les exigen que paguen en pesos colombianos. La bombona de 10 kg, 10 mil pesos; 18 kg, 18 mil pesos; 27 kg, 27 mil pesos; y 43 kg, 43 mil pesos. Es decir, cada kilogramo lo cobran (más no lo facturan) a 1.000 pesos. ¡Y es lo que hay!

Caraqueñidades: La pluma (y la lengua) de Luis Martín

"Caraqueñidades" se llama la publicación del colega y amigo Luis Carlos Martín, que fue presentada recientemente en el marco de la Feria Internacional del Libro Venezuela 2022. El acto protocolar se realizó el pasado 15 de noviembre en la Galería de Arte Nacional, donde convergieron escritores venezolanos e invitados de otras latitudes, quedando ratificado una vez más la importancia del evento, que ya es un referente en la cartelera cultural del país.


Aunque nacido en Guárico, Martín cuenta con una dilatada trayectoria como periodista en Caracas, ciudad que lo adoptó desde que egresó de la Escuela de Comunicación Social de la UCV. Además de ser un destacado cronista deportivo, también cuenta con el aval de muchos años en el periodismo institucional, corresponsal de varios medios nacionales y, sumado a todo esto, consecuente colaborador y columnista permanente de numerosas publicaciones, de donde afloró su prolífera producción como acucioso relator y recopilador de la historia, los personajes y los hechos más sobresalientes de su amada Caracas.

Y es así como surge "Caraqueñidades" (Librería Digital CCS, Colección 2022), que recoge historias, ensayos y relatos sobre la capital, su entorno y su gente, la mayoría publicados en el medio Ciudad Caracas, bajo el auspicio de la Alcaldía del Municipio Libertador. La selección hecha para la ocasión incluye relatos de tradiciones; de espantos, creencias y amuletos; de Bolívar; de médicos; de fe; de damas, así como unos cuantos homenajes, brollos y chismes -agregaríamos- en un repertorio en el que no se salvan ni los cuenteros, los pedigüeños, los coberos y los arroceros, cuya osadía y atrevimiento los convirtieron en verdaderos personajes de la capital de antaño y de siempre y en protagonistas infaltables en varias crónicas de Luis Martín.

Caraqueñidades puede ser descargado desde el enlace: https://ciudadccs.info/publicaciones


Luis Padilla Niño


 


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